Así, a cambio de un donativo de tres euros, todos los menores onubenses de entre seis y doce años tendrán la posibilidad de disfrutar esta experiencia acuática.

Al respecto, el delegado de la ONG en Huelva, Antonio Rodríguez Nogales, ha explicado que "la recaudación se destinará este año a avanzar en el proyecto de construcción de viviendas en Ecuador y a impulsar un convoy de ayuda humanitaria destinado a Indonesia".

El fin, ha remarcado, es "paliar las graves consecuencias del terremoto y posterior tsunami que afectó el pasado mes de octubre a la zona norte y en especial a la ciudad de Palau", donde una expedición onubense, provista de unidad canina, colaboró en las tareas de rescate y asistencia.

"Para los bomberos onubenses es además una de nuestras actividades preferidas porque nos permite estar en contacto directo con los niños y compartir su ilusión", ha remarcado Nogales.

Antes de sumergirse en el agua, los pequeños reciben una breve explicación por parte de los profesionales y tras realizar algunas pruebas de respiración con regulador de buceo, entran en la piscina, siempre acompañados por un buceador experto. Aunque la profundidad es mínima, permite experimentar la sensación de ingravidez del agua y observar de cerca las figuras y estructuras que conforman el belén.

Para más información, visitas concertadas de grupos o reserva de acceso, se puede acudir tanto al Parque Municipal de Bomberos, como al propio Polideportivo Municipal Andrés Estrada.

La iniciativa partió hace ya siete años de la delegación onubense de BUSF, con el objetivo de recaudar fondos para financiar sus proyectos de cooperación y rescate en todo el mundo.