Así lo han presentado este martes en rueda de prensa el presidente de la Audiencia Provincial de Baleares, Diego Gómez-Reino, y el director de la Oficina de Defensa de los Derechos del Menor (ODDM), Serafín Carballo.

Gómez-Reino ha explicado que la sala tiene un doble propósito. Por una parte, los menores no tendrán que esperar en los pasillos, donde se pueden producir encuentros con el agresor, y, por otro lado, sirve para que puedan declarar o ser entrevistados en un entorno favorable.

Dichas salas, que están equipadas para poder realizar videoconferencias, son el resultado de la petición de la ODDM a Ministerio de Justicia para que se cediera un espacio en cada sede judicial para habilitar habitaciones para niños y menores que deban comparecen en los juzgados y tribunales.

Según ha informado Carballo, la intención es que a lo largo de 2019 las dependencias judiciales Menorca -Mahón y Ciutadella-, Ibiza, Inca y Manacor también se equipen con este tipo de salas.

En estas salas, los menores podrán estar acompañados por sus padres, tutores, educadores, terapeutas o técnicos. Además, permanecerán cerradas y solo se abrirán bajo una petición de los representantes de los menores.

Asimismo, el Consell de Mallorca tiene cedida una cámara Gesell -una habitación que permite observar a personas a través de un vidrio sin que ellas puedan ver al observador-, que está a disposición de los juzgados para ser utilizada un día a la semana.

Tanto Gómez-Reino como Carballo, se han referido también al aumento exponencial de los casos de abusos a menores en los últimos años. Según han sintetizado, esto se produce no porque ahora haya más, sino porque se detectan antes y existe más sensibilización.