Ya que endurecieron las condiciones del préstamo.  Los bancos endurecieron el año pasado las condiciones para conceder hipotecas, debido sobre todo al deterioro de las perspectivas del mercado de la vivienda. Esto hizo que las entidades financieras ralentizaran la concesión de estos créditos.

De hecho, la deuda contraída por las familias españolas para comprar una vivienda sólo subió un 13,2% en el 2007, el ritmo de crecimiento más bajo desde 1995, año en que comenzó a registrarse esta estadística, según los últimos datos publicados ayer por el Banco de España.

En total, las familias españolas deben actualmente a los bancos 646.000 millones de euros en concepto de hipoteca y 228.000 millones en créditos de consumo.