El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mostrado este miércoles su solidaridad con su ministros de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, "que ha tenido que soportar palabras y gestos inaceptables" en la sesión de control en el Congreso, donde ha acusado a un diputado de ERC de escupirle, un extremo que el grupo independentista niega.

En un mensaje de Facebook, a mostrado "toda" su "solidaridad con el ministro Borrell, que ha tenido que soportar palabras y gestos inaceptables. Y agradecer a la presidenta del Congreso sus palabras y su defensa de la moderación".

Sánchez ha difundido un extenso mensaje en Facebook para referirse a la tormentosa jornada de este miércoles en el Congreso raíz de la cual ha considerado que "todos debemos pedir disculpas a la sociedad". "Yo, como presidente del Gobierno, lo hago. Pido disculpas a la sociedad".

El presidente se refería a lo ocurrido en la sesión de control al Gobierno, donde la presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha expulsado del hemiciclo al diputado de ERC Gabriel Rufián después de llamarle tres veces al orden para que dejara de increpar a Borrell. De él ha dicho que es "un hooligan" y "el ministro más indigno de la democracia". Por su parte, Borrell ha acusado a Rufián de ir al Congreso a verter "esa mezcla de serrín y estiércol que es lo único que usted es capaz de producir".

Además, en un tono emocionado en el que ha llegado a criticar los "insultos machistas" que lee en prensa sobre ella, Pastor ha reclamado a los diputados que mantengan las formas, ya que en el hemiciclo no pueden escucharse insultos como los de "fascista" y "golpista" que se escuchan demasiadas veces en los últimos tiempos.

"Hoy en el Congreso se han dicho y hecho cosas terribles", ha dicho Sánchez a través de la red social, donde ha recordado que "no es la primera vez". "Yo mismo he sido objeto de palabras gruesas y graves insultos hace pocas semanas", ha añadido y ha pedido una "reflexión de todos los diputados y diputadas que utilizan la palabra para insultar", con lo que "socavan la dignidad" de la institución.

"No hay nada más peligroso para una democracia que la desafección ciudadana ante sus representantes e instituciones, y lo sucedido hoy camina en esa dirección", ha dicho Sánchez, que ha conminado a los diputados que "si bien lo visto hoy en el Congreso no es la primera vez que sucede, sí sea la última".

Posteriormente, en la rueda de prensa de la XXX Cumbre Hispano-Lusa, que Sánchez ha ofrecido la noche de este miércoles en Valladolid junto al primer ministro portugués, Antonio Costa, el presidente del Gobierno ha pedido a Rufián y al líder de PP, Pablo Casado, que se disculpen por "insultar" y "difamar" en el hemiciclo del Congreso.

"Pedir disculpas es bueno y sano también en democracia", les ha recordado.

El presidente ha recordado que él rompió relaciones con Casado precisamente por eso, pero no con el PP -"ahí está el malogrado acuerdo para la renovación del CGPJ", ha dicho-, por lo que tampoco romperá relaciones con ERC.

A su juicio, tanto Rufián como Casado deberían pedir disculpas. "Se piden disculpas, se explica que algunas veces en el fragor del debate parlamentario uno puede excederse y extralimitarse y se acabó, pero se reconoce esa responsabilidad y esa descalificación y se piden disculpas, no pasa nada", ha subrayado.