Bajos sueldos y deficientes condiciones laborales llevan a los zaragozanos a no solicitar este tipo de empleos o a rechazarlos cuando se los ofertan.

Aunque la mayor parte de estos empleos no necesitan cualificación, también resulta difícil encontrar empleados para otros trabajos más especializados, como animador geriátrico,  auxiliar de enfermería de salud mental y toxicomanía o deportista y entrenador profesional.

En el primer trimestre de 2008 se observa como novedad que hay una falta de auxiliares en odontología, protésicos e higienistas bucodentales, así como de delineantes , ebanistas y conductores de grúas.

Las profesiones más difíciles de cubrir siguen siendo, al igual que en el primer trimestre de 2007,  fontanero, soldador, peón y conductor de autobús.

Sin embargo, han salido de la lista profesiones como cajeros de banca, esteticista, profesor de educación vial o animador sociocultural.

Un trabajo entra a formar parte del catálogo de ocupación de difícil cobertura cuando ha sido solicitado por una empresa al Inaem y no ha sido cubierto.

El que un puesto de trabajo se encuentre incluido en este catálogo supone que un empresario puede contratar a un empleado extranjero cuando no existan trabajadores españoles disponibles y adecuados. Según Andrés Esteban, secretario de formación y empleo de CC OO, los empresarios utilizan esta medida en exceso para «contratar mano de obra más barata».

Muchos contratados

En enero de 2008 se realizaron 31.812 nuevos contratos, o conversiones a contratos indefinidos, en Zaragoza. De éstos, la mayoría pertene a peones de industrias manufactureras, con 5.179 contratos, de los que 2.191 fueron hechos a personas extranjeras. Para personal de limpieza se realizaron 3.428 contratos, con casi la mitad para extranjeros: 1.344. Con la llegada de las rebajas también se incrementó el número de contrataciones en el comercio, ya que hubo 2.168 nuevas dependientas. Camareros, albañiles, peones y cocineros también estuvieron muy demandados en enero.