El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Albacete, Francisco Navarro, ha confirmado que el Servicio de Salud Ambiental del Ayuntamiento de Albacete estudia cómo actuar ante la aparición de "supuestos pollos" colgando al sol que se han hallado en el balcón de una vivienda en la capital, en proceso de secado.

Navarro, que ha comparecido ante los medios de comunicación a raíz de haber salido a la luz a través de las redes sociales este caso, ha confirmado que, a raíz de la denuncia de "varios vecinos" de la confluencia del edificio en cuestión, que se encuentra entre las calles Pedro Coca y Octavio Cuartero, se realizaron dos intervenciones por parte de la Policía Local los pasados domingo 11 y lunes 12.

El domingo, los agentes acudieron a la vivienda, pero no pudieron acceder al inmueble porque no había nadie, aunque sí constataron que, desde el exterior del inmueble, se podía apreciar en el balcón la existencia de "lo que a primera vista parecen pollos".

El lunes 12, los agentes regresaron, ha explicado el concejal, y abrió la puerta "una señora de nacionalidad china, con la dificultad importante de que no habla el idioma", pero permitió el acceso de los agentes, que pudieron revisar la vivienda y realizar fotografías.

La señora, "en la medida en que pudo explicarlo, afirmó que eran para su propio consumo", ha indicado en concejal, que ha afirmado que "sí se puede descartar que sean palomas y, aunque aún no se puede determinar qué otro animal es, es probable que puedan ser pollos".

El parte policial se remitió al Servicio de Salud Ambiental, que es el competente para determinar la actuación que corresponda ahora, y, en su caso y si lo considera oportuno, de dar traslado al Servicio de Consumo y Salud Ambiental de la Junta de Comunidades. Desde el Ayuntamiento de Albacete aseguran que este jueves los animales seguían ahí y que el caso se está investigando.

"En caso de ser para consumo propio, no sería ilegal", explican desde el Consistorio, razón por la cual Sanidad no podría intervenir. Navarro confirmó que "sólo por este hecho de estar ahí" los restos de los animales "habrá un procedimiento sancionador", independientemente de lo que se determine en el expediente que tramita el Servicio de Salud Ambiental.

La Policía Local está investigando si la mujer dijo la verdad o si por el contrario pudieran ser utilizados para algún posible restaurante asiático. A la espera de que se confirme el uso real de estos animales colgados en el balcón, desde el Ayuntamiento comentan a 20minutos que "un restaurante chino que está justo debajo de la vivienda en cuestión y que no tiene nada que ver con el tema se está viendo afectado".