Según el Ayuntamiento de Utrera, el plan especial del casco histórico aprobado en 2009 es "muy rígido" y en noviembre de 2016, el alcalde avisaba ya de que el mismo

"no está adaptado a la realidad social, económica y urbana".

Así, el pasado 23 de diciembre de 2016, la junta local de gobierno aprobó inicialmente la primera modificación del plan especial del casco histórico, que según el Consistorio cosechó "los informes favorables tanto de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico como de la Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio".

Dado el caso, el pleno ordinario celebrado por el Ayuntamiento de Utrera el pasado 8 de noviembre supuso la aprobación definitiva del citado texto, que "manteniendo la protección del patrimonio histórico", corrige errores detectados en los planos de ordenación

y fichas del plan de 2009 y matiza o modifica determinados aspectos de la norma merced a los acuerdos de la Comisión Local de Patrimonio.

Además, el documento definitivo modifica la catalogación de

inmuebles concretos y algunas fichas de actuación para "adaptar las mismas a la situación real de su desarrollo a fecha actual".

"Hablamos por un lado de afrontar con realismo, para que se verdaderamente materializable, la puesta en valor del Castillo y sus murallas, o la actuación en el ámbito de Consolación, relativa al Monasterio de los Mínimos. Y Hablamos igualmente de responder a solicitudes de los ciudadanos de corrección o modificaciones de fichas que se encontraban pendientes de resolver desde 2010", ha expuesto el concejal de Urbanismo, Víctor Sánchez.

Según el concejal, "este es un primer paso de una necesaria revisión del plan especial en profundidad, que venga no solo a proteger los verdaderos valores patrimoniales de Utrera, sino que también sea compatible con la vida de los utreranos en el ámbito del conjunto histórico".