El Puerto de Tarragona cuenta con unas instalaciones refrigeradas de más de 20.000 metros cuadrados y con una terminal de contenedores que complementa las de exportación, además de un punto de inspección fronteriza (PIF) homologado para la entrada de frutas a la UE, ha informado en un comunicado este lunes.

También dispone de conexiones marítimas con los principales países exportadores de fruta, como Nueva Zelanda, Costa Rica, Colombia y República Dominicana, además de con Canadá y Estados Unidos.

Para promocionar estos servicios, el enclave portuario ya tiene entrevistas formalizadas con empresas importadoras y exportadoras del sector, así como con empresas comercializadoras y navieras.

El Puerto de Tarragona cerró 2017 con un tráfico de frutas y verduras superior a las 137.739 toneladas, con especial protagonismo de los kiwis, principalmente de Nueva Zelanda, y de las piñas y los plátanos, que llegan procedentes de Costa Rica y Colombia.