Fue la imagen más comentada de los actos institucionales con motivo del Día de la Hispanidad. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y su esposa, Begoña Gómez, se situaron junto a los reyes en la recepción en el Palacio Real antes de que estos comenzaran a recibir apretones de manos de los invitados. Un encargado de protocolo avisó a Sánchez del error y el presidente y su mujer se retiraron. Pero ahora, una periodista de La Vanguardia, Mariángel Alcázar, revela que el fallo no fue de Sánchez.

Según Alcázar, el fallo fue de la presidenta del Congreso, Ana Pastor. Al parecer, había pactada una foto de los reyes, Sánchez y su esposa, Pastor y los representes de la Justicia, para escenificar el respaldo de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial a la figura del monarca. Por ello, el presidente y Begoña Gómez debían quedarse unos instantes al lado de los reyes Felipe y Letizia.

Pero al contrario de lo que se había hablado, Pastor siguió caminando en vez de esperar, según Alcázar, aunque en las imágenes se aprecia que uno de los encargados de protocolo entra en escena antes de que esto ocurra.

Pedro Sánchez, posteriormente y según Alcázar, dijo que él solamente hizo "lo que me han dicho".