La alternativa, que "se va a estudiar con cariño" por el Ministerio de Fomento, según indicó el Secretario de Estado del Ministerio de Fomento, Víctor Morlán, consiste en utilizar desde Toledo a Consuegra 80 kilómetros ya construidos de la autovía de los Viñedos y, desde allí, construir un nuevo trazado para, siguiendo los corredores autonómicos CM-4116 y CM-4167 para enlazar con la N-401, al sur de Urda, y en este punto continuar por la N-401 hasta Ciudad Real.

El resto de la denominada A-41 ó AP-41 continuará hacia Córdoba sin que de momento haya ningún proyecto en concreto y sin descartar su conexión a través de la N-502 desde Almadén, indicó Morlán.

De continuar por ahí la conexión entre Toledo y Córdoba utilizaría parte de la autovía Valencia-Lisboa, que se realizará, en principio, por esa zona discurriendo desde Ciudad Real hacia Almadén, en la llamada opción sur.

Con respecto al tramo de autovía que ayer se inauguraba y que completa la autovía que une Ciudad Real con Puertollano, el presidente del Gobierno regional, José María Barreda, aseguró que esta "importante" infraestructura se ubica en un "núcleo de dinamismo" ya que discurre paralela a la línea de alta velocidad Madrid-Sevilla y cerca del Aeropuerto de Ciudad Real. Se trata, por tanto, de un "corredor de dinamismo".

Este tercer tramo inaugurado une las localidades de Argamasilla de Calatrava y Puertollano, se completa la Autovía Ciudad Real-Puertollano (A-41) con la que se sustituye la actual carretera N-420 y se constituye una prolongación de la autovía Ciudad Real-Daimiel-Atalaya del Cañavate.

La inversión total de esta infraestructura asciende a los 45'8 millones de euros.

Por otra parte, desde CEOE-CEPYME de Ciudad Real, expresaron su "satisfacción" por la puesta en marcha de dicho tramo que supondrá un desarrollo socioeconómico para la provincia, ya que significa mejorar un tramo con una alta densidad de tráfico.

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