El pasado viernes el Tribunal Supremo declaró exentas de pago del IRPF a las prestaciones de maternidad percibidas de la Seguridad Social, ratificando así una sentencia anterior del Tribunal Superior de Justicia de Madrid y quitándole la razón a los tribunales de Andalucía y Castilla-León, que habían decidido que el gravamen era correcto.

Es un dinero que pueden reclamar todos los que percibieran prestaciones de maternidad desde 2014. El Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), calculó entonces que  el Gobierno tendría que devolver a los contribuyentes en torno a los 1.300 millones de euros, al considerar un gravamen de entre el 19% y el 21% que es el típico en una mujer joven en edad de ser madre.

Según informa este miércoles La Información, aunque el Supremo solo mencione el término "maternidad" y en ningún momento hable de la prestación de "paternidad", la Seguridad Social está eliminando ya estas retenciones, sin aguardar a que Hacienda habilite la devolución.  Y lo está haciendo tanto a las madres como a los padres.

El diario financiero financiero cita a fuentes del Ministerio de Trabajo que aseguran que el Instituto Nacional de la Seguridad Social ha paralizado ya la tramitación de las prestaciones tanto de paternidad como de maternidad y que Hacienda "no tendrá ningún problema en ampliar el criterio a la paternidad".

"Sería extraño que se hiciese esta distinción en un gobierno como este", aseguran dichas fuentes, que añaden que ya desde este mes empezarán a abonarse las prestaciones de IRPF sin esa retención, en cuanto la actualización informática esté operativa.

Los afectados que deseen reclamar el dinero deben iniciar un procedimiento de devolución de ingresos indebidos ante la Agencia Estatal de la Administración Tributaria. Es decir, deben realizar una liquidación paralela del ejercicio correspondiente, para lo que deben acudir a las ventanillas de Hacienda.  Incluso aquellos que ya reclamaron y recibieron una negativa, pueden volver a solicitarlo.