Tras la reunión celebrada ayer en Alicante, el conseller de Cultura, Alejandro Font de Mora, explicó que la inversión total será de 10 millones de euros. Cerca de la mitad, 4,3 millones se dedicarán a la restauración de los centros expositivos cuyas obras comenzarán en septiembre y estarán a cargo de 20 arquitectos.

 

- Concatedral de San Nicolás. Se invertirán 1,53 millones de euros para restaurar el claustro, sustituir pavimentos, crear aseos públicos y un centro de visitantes, renovar la sacristía y mejorar la instalación eléctrica.

 

- Iglesia de Santa María. Cuenta con un presupuesto de 1,09 millones de euros para urbanizar la plaza exterior, renovar el mobiliario urbano, habilitar la nave central para la exposición y los bajos para aulas didácticas.

 

- Convento de las monjas de la Sangre. Se destinarán un total de 225.458 euros para limpiar y habilitar la fachada principal.

 

- Monasterio de la Santa Faz. Rehabilitación del camarín, restauración de alzados, lienzos y fachada, y urbanización de la plaza, recuperando los niveles originales.

 

La fundación y las monjas clarisas han firmado un convenio para habilitar el zaguán claustral de modo que se pueda utilizar para celebrar las ceremonias religiosas mientras dura la exposición La faz de la eternidad. Costará 1.493.000 euros. Unos 100 restauradores se encargarán de recuperar 100 de las 300 obras de arte de la muestra.