Vicios ocultos, retrasos, cláusulas abusivas... Éstas y otras malas prácticas registradas en el sector inmobiliario siguen protagonizando las reclamaciones y consultas de los consumidores, según datos de la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (Fuci), que, en su informe anual, describe al sector de la vivienda como el más problemático por quinto año consecutivo.

En el año 2007, esta asociación recogió un total de 6.261 reclamaciones, el 12% del total, muy por encima de las 5.807 del año anterior. «Este hecho supone una mala noticia para los consumidores, ya que año tras año se repiten los mismos problemas e incumplimientos», asegura Miguel Torres, asesor económico de Fuci.

La mayor parte de las reclamaciones de los usuarios tienen que ver con las deficiencias en la prestación de servicios (57%), como los fallos en los acabados de la vivienda o los retrasos en la entrega de llaves.

Cobros indebidos

El incumplimiento de las condiciones de la venta, como la memoria de calidades, protagoniza el 12% de las reclamaciones. Le siguen las quejas sobre los precios pagados y el cobro de cantidades indebidas por parte de las empresas inmobiliarias y constructoras, con el 11% del total.

Los usuarios también protestan por las cláusulas abusivas (9%). La más habitual es que la promotora obligue al comprador a subrogar la hipoteca que ha contratado previamente o al pago de su cancelación. Otro 7% de usuarios reclamaron por haber sido víctimas de algún tipo de publicidad engañosa.

También en el alquiler

El 35% de las reclamaciones de vivienda que se hicieron en 2007 tenían que ver con el alquiler de vivienda. De ellas, el 37% tuvo como protagonistas las deficiencias en la prestación de servicios. Les siguen, en número de quejas, los precios de los arrendamientos (37%) y las cláusulas abusivas de los contratos (23%). El último motivo de reclamación por parte de los usuarios es, con el 2% del total, la publicidad engañosa.