"Más pensiones, menos ladrones". Ese fue el lema que encabezó la manifestación de pensionistas de este lunes en Madrid, que transcurrió entre Antón Martín y el Congreso de los Diputados. Pero la capital no fue el único lugar con movilizaciones. Con motivo del Día Internacional de las Personas Mayores, miles de jubilados salieron a la calle en 52 ciudades españolas para pedir mejoras en el sistema de pensiones.

Al mismo tiempo, la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, que se reunió en Bilbao con representantes del sector –que fueron los primeros en manifestarse hace meses–, insistió en que el Gobierno de Sánchez está "ocupado" en conseguir, a través del Pacto de Toledo y la Mesa de Diálogo Social, un sistema de pensiones "sostenible social y financieramente". Eso sí, apuntó que no se puede comprometer a que el año que viene haya pensiones mínimas de 1.080 euros, como pide el colectivo.

Precisamente desde Madrid, los sindicatos instaron a la ministra a que avancen también las negociaciones tripartitas en la mesa de diálogo social sobre pensiones, abordando los ingresos del sistema con medidas sobre las personas cuyas cotizaciones son inferiores a sus ingresos. Así lo solicitaron el secretario de Políticas Públicas y Protección Social de CC OO, Carlos Bravo, y la secretaria confederal de UGT, Adela Carrió, entre otros representantes.

El propio Bravo plantea actuar sobre las bases máximas y mínimas y sobre los tipos de cotización a la Seguridad Social, es decir, todos aquellos a los que se les aplica la base máxima de cotización, los trabajadores del régimen de autónomos o las empleadas del hogar.

En Bilbao, los pensionistas decidieron proseguir con sus movilizaciones semanales tras el descontento por la reunión con la ministra, cuyo resultado provocó pitidos y gritos de "fuera, fuera" entre los miles de manifestantes que reclamaron cambios inmediatos. La protesta más numerosa de Andalucía tuvo lugar en Sevilla, donde se reclamó que las pensiones vuelvan a revalorizarse conforme al IPC, al igual que en las manifestaciones de Castilla y León. Los manifestantes de Valencia cortaron durante más de una hora un tramo de la calle Colón, principal arteria de la ciudad, mientras reivindicaban un pacto de Estado que garantice "las pensiones del futuro".

Por otro lado, en Palma decenas de pensionistas exigieron al Ejecutivo de Pedro Sánchez la derogación de la reforma del PP de 2013 tras una pancarta que rezaba 'Defender las pensiones es cosa de todos', y en Logroño se concentraron bajo el lema 'Exigimos la revalorización de las pensiones'. Asimismo, en las concentraciones de Castilla-La Mancha también se quiso llamar la atención sobre las pensiones más bajas, mientras que en Santander se enfatizó el hecho de que algo más de uno de cada cinco pensionistas no llega allí a los 710 euros al mes.

Cabe recordar que en Cataluña los sindicatos optaron por adelantar la jornada de protesta al viernes pasado para evitar que coincidiera con el primer aniversario del referéndum ilegal del 1 de octubre, mientras que mañana y pasado hay programadas movilizaciones en Aragón, Extremadura, Galicia y Asturias.

Por otra parte, la ministra de Trabajo y Seguridad Social, Magdalena Valerio, ha afirmado esque, aunque le "gustaría", el Gobierno "no se puede comprometer" a que el año que viene haya unas pensiones mínimas de 1.080 euros al mes y un Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 1.200 euros, como reclaman los jubilados y pensionistas.

En una jornada marcada por las movilizaciones de jubilados y pensionistas, Valerio se ha reunido en Bilbao con una representación del colectivo de pensionistas en Bizkaia, que le han planteado sus reivindicaciones y sus "dudas" con relación al acuerdo en la comisión del Pacto de Toledo para revalorizar las pensiones con arreglo al IPC "real".

En una rueda de prensa posterior, la ministra de Trabajo ha afirmado que "el Gobierno no se puede comprometer, porque mentiría" a que el año próximo pueda establecerse una pensión mínima de 1.080 euros al mes ni un SMI de 1.200 euros, como piden los pensionistas. "Ya nos gustaría a todo el Gobierno (aprobar dicha pensión mínima), pero sencillamente, ahora mismo, el Gobierno y toda la sociedad debe tener claras dos prioridades: la sostenibilidad social del sistema público de pensiones para garantizar el mantenimiento de su poder adquisitivo, y la sostenibilidad financiera del sistema", ha añadido Valerio, quien ha adelantado que los pensionistas le han comunicado que van a "seguir" con sus movilizaciones.

Valerio ha asegurado además que el sistema "tiene presente" y hay que "luchar para que tenga futuro" con la adopción de una serie de medidas para "reorientar" el sistema para "controlar el déficit y a ser posible convertirlo en superávit".

La ministra, que ha dicho que solo con las cotizaciones no se va a poder mantener el sistema, ha tildado de "letal" el efecto de la reforma laboral del PP, y ha mostrado su confianza en que este año no sea preciso recurrir al fondo de reserva de las pensiones. Además, ha señalado que el Gobierno "no considera una prioridad" la transferencia de la Seguridad Social del País Vasco.