El joven actor estadounidense Timothée Chalamet, protagonista de 'Beautiful boy', de Felix Van Groeningen, ha opinado que este filme que se presenta en Sección Oficial del 66 Festival Internacional de Cine de San Sebastián puede ayudar frente a la "enorme epidemia" de la adicción a las drogas en Estados Unidos, actuando como "una especie de espejo", así como a que este problema "deje de ser tan tabú" y se pueda hablar de él "sin vergüenza".

Chalamet y Van Groeningen han comparecido en rueda de prensa para dar cuenta de esta película, basada en los libros de memorias de David Sheff 'Beautifol Boy: A father's Journey Through His Son's Addiction' publicadas en 2008 sobre la adicción de su hijo, Nic Sheff, a las drogas y el libro 'Tweak', en la que este último contaba su punto de vista.

Chalamet, al que acompañan en el reparto Steve Carell, Maura Tierney y Amy Ryan, ha explicado que la película va sobre cómo la adicción "no tiene límites y no discrimina en base a raza, género o clase", sino que cualquiera puede tener una. El actor ha apuntado que en Estados Unidos se da "una crisis de opiacios", en la que "gran parte de la gente tiene una adicción" y las adicciones y las sobredosis "matan a más gente que la que violencia por armas de fuego o los accidentes de tráfico, en concreto más de 50.000 personas el año pasado.

En este contexto, ha opinado que este filme puede "ayudar" frente a este problema, sirviendo de "una especie de espejo", frente a esa "enorme epidemia", así como contribuyendo a que "deje de ser tan tabú y se pueda hablar de ello sin vergüenza". Al respecto, ha señalado que esta película "no es entretenimiento, sino que tiene "un mensaje" a transmitir.

Chalamet ha señalado que se incorporó al proyecto un mes y medio antes del rodaje y tuvo que perder ocho kilos para la película, y sobre cómo preparó su personaje ha indicado que se apoyó en los libros anteriormente citados y también en la relación con el resto de actores del reparto, con el propio Nick Sheff, al tiempo que ha reflexionado sobre "la humanidad" de su personaje, que ha confesado ha sido "lo más difícil" de interpretar.

En este sentido, ha señalado que quería que su papel resultara "conmovedor para el público", para que "empatizara" y viera que "esto le puede pasar a cualquiera".

También ha señalado que es "una locura" tratar de superar una adicción cuando se es joven, "todo un desafío". Preguntado sobre cómo fue salir de esta película, el joven actor ha confesado que es "algo muy difícil" y algo contra lo que "siempre" lucha "mucho", ya que le cuesta porque "vas al cien por cien", y eso que ha estado "ocupado" tras finalizar el rodaje.

Por su parte, preguntado por la banda sonora del filme, el director ha señalado que las "grandes canciones" que suenan, entre otras de Nirvana o John Lennon están inspirados en los libros en los que se basa 'Beautiful boy', en los que la música es "una pasión compartida" entre padre e hijo. "La música fluye y pasa a través del tiempo", ha indicado, para añadir que ayudó ha "hacer una banda sonora de la vida" del protagonista.

"AMOR INCONDICIONAL"

También ha explicado que para él era "muy importante" hacer esta película, porque "no solo trata de la adicción, sino también de cómo una familia tiene que atravesarla y superarla" y quería que la gente "empezara a hablar de este tema". Van Groeningen ha asegurado que ha sido "un viaje hermosísimo" rodarla y que ha "aprendido mucho" de esta película, como siempre le ocurre en sus películas.

Además, ha aplaudido que los Sheff siguen siendo "una familia hermosísima, llena de amor incondicional", del cual ha asegurado también "está llena" esta película, así como "de esperanza" aunque la historia "sea dura".

Finalmente, preguntados por su postura en torno al debate sobre legalización de la marihuana, Van Groeningen ha señalado estar a favor de que los adictos no vayan a la cárcel, mientras que Chalamet ha apoyado esta postura y también la legalización .