Las subidas de la luz, como la anunciada para el próximo miércoles 19 de septiembre, son uno de los gastos que más resienten la economía doméstica cada mes, en especial, en los hogares considerados más vulnerables, como pueden ser aquellos con una renta baja, en los que residen familias numerosas o donde todos los miembros de la unidad familiar sean pensionistas con una pensión mínima por jubilación o incapacidad permanente, entre otros.

Para reducir el impacto de las fluctuaciones de las facturas en este colectivo, desde el Gobierno se facilita desde hace unos años un bono social que permite aplicar un descuento sobre la factura de la luz a quienes cumplan los requisitos establecidos, que fueron modificados en octubre de 2017 con la entrada en vigor del Real Decreto 897/2017 y que afectan al tipo de tarifa eléctrica, al consumo y a la situación económica, personal y familiar de los solicitantes.

Según lo recogido en el BOE, para poder solicitar el bono social, la potencia contratada de la tarifa eléctrica de los consumidores titulares de un punto de suministro de electricidad en la vivienda habitual deberá ser "igual o inferior a 10 kW".

Por otra parte, los mismos consumidores deberán estar acogidos al Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC), una tarifa regulada por el Gobierno y dirigida a clientes que cuentan con un contrato con una comercializadora de referencia para quienes se cierran unos precios determinados. Esta tarifa, hasta 2014, era conocida como Tarifa de Último Recurso (TUR).

Para que el solicitante pueda ser considerado 'consumidor vulnerable' y entrar dentro de los beneficiarios de esta ayuda debe cumplir con alguno de los requisitos establecidos en el BOE, a saber:

Consumidor vulnerablem descuento del 25%:

En el caso de que algún miembro de la unidad familiar tenga discapacidad igual o superior al 33%, acredite una situación de violencia de género o tenga la condición de víctima de terrorismo, los multiplicadores de renta del IPREM de los casos anteriores podrán aumntar en 0,5.

Consumidor vulnerable severo, descuento del 40%:

Consumidor en riesgo de exclusión social:

Para poder aplicar los descuentos establecidos, los distintos colectivos de clientes considerados vulnerables no pueden superar determinado límite de consumo.

En el caso de los consumidores con renta baja sin menores a cargo, el límite está establecido en 1.200 kWh al año, para aquellos que cuenten con un menor a cargo asciende a 1.680 kWh al año, la misma cuantía que corresponde a los pensionistas y si son dos menores a cargo, la cifra se queda en 2.040 kWh al año. El límite más alto se establece para las familias numerosas, que pueden consumir hasta 3.600 kWh de electricidad al año.