La delincuencia juvenil es cada vez una realidad más presente en Córdoba. Así lo pone de manifiesto la memoria judicial 2006 publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La situación es más preocupante en la provincia en lo que se refiere a las infracciones penales cometidas por los menores de sólo 14 años –edad más baja a partir de la que se tiene referencia–. El número de encausados con esta edad se duplicó en 2006 en relación al ejercicio anterior, hasta llegar a 95 chavales. Es en esta franja de edad donde se acentúa el aumento de los delitos cometidos por menores en Córdoba, aunque a nivel global se observa un crecimiento del 27,2% de los casos, al pasar en un sólo año de 359 a 457, según el informe del INE. A pesar del incremento de la cifra de delincuentes de 14 años, el grueso de menores con problemas con la Justicia son los que tienen 17, que aglutinan al 27,7% de los chavales infractores. Para la pedagoga Pilar Casares una parte de esta subida se explica a través de lo que ella llama «educación informal», donde los medios de comunicación cobran una especial relevancia. En su opinión, hay determinadas series de televisión que «presentan a personajes que mezclan valores positivos y negativos, lo que confunde al joven espectador y dificulta su percepción de cuáles son los límites». Los robos y los hurtos son los delitos más cometidos por los menores cordobeses. El 40,7% de los expedientes tienen que ver con este tipo de infracciones. Destaca el hecho de que en 2006 no hubo ningún menor imputado por un homicidio.

Las chicas cada vez delinquen más

El perfil del menor delincuente en Córdoba es claramente de sexo masculino. Sin embargo, se observa un progresivo aumento de las chicas que tienen que rendir cuentas ante la Justicia. En 2006 fueron 30 las menores de 18 años que cometieron alguna infracción penal, un 7% más. El conocido juez de menores de Granada, Emilio Catalayud, afirma que las féminas están «masculinizando» su actitud. «Ellas están copiando lo malo de los chicos», concluye.