Según el escrito, el acusado mantuvo relaciones sexuales con penetración con la víctima desde 2014 hasta 2017. Los actos ocurrían cuando el varón se quedaba a solas con ella, con la excusa de que la llevaría de paseo por la zona de El Arenal de Palma.
De este modo, la Fiscalía solicita la pena de prisión de nueve años y la prohibición de acercarse a la víctima a una distancia de 200 metros y mantener cualquier tipo de relación verbal durante nueve años.
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