La juez de Primera Instancia número 8 de Barcelona ha rechazado desahuciar el Centro Social Autogestionado (CSA) de 'Can Vies' a instancias de Metro de Barcelona, propietaria de este edificio del barrio de Sants, porque la empresa firmó en 1984 un contrato de cesión con la CNT y, por lo tanto, debió demandar a este sindicato, y no a la quincena de las entidades que hacen uso de la finca.

Con su sentencia, la magistrada desestima la demanda de Ferrocarril Metropolità de Barcelona (FMB) --la empresa que explota el Metro y que depende de TMB-- contra el CSA 'Can Vies' y contra los "ignorados ocupantes" de la finca, situada en la calle Jocs Florals, de los que han comparecido en el proceso una quincena de entidades y asociaciones. El edificio fue 'okupado' en 1997 por los vecinos de Sants como "hotel de entidades".

La sentencia tiene en cuenta un contrato que la empresa firmó en julio de 1984 y que autorizaba a FMB "como medida provisional" a "ocupar y utilizar" el actual CSA 'Can Vies'.

La empresa municipal, sin embargo, se reservaba la posibilidad de revocar dicha cesión en cualquier momento y, llegado el caso, la sección sindical debía desalojar la finca. No obstante, relata la sentencia, "resulta que la CNT, de cuya escisión nació la CGT, ha venido haciendo uso de las fincas de autos en virtud de la cesión efectuada en el documento de 10 de julio de 1984", abriéndolas a otras entidades.

La juez señala que no puede dictar una resolución que afecte "a personas no demandadas" y afirma que FMB "debió demandar a dicho sindicato. La sentencia, que puede ser recurrida, obliga además a la empresa a pagar las costas del proceso.