La actuación ha tenido lugar días atrás, cuando fruto de un control policial instalado en las inmediaciones de un parque acuático en la localidad torremolinense, los agentes dieron el alto al conductor de un vehículo que circulaba por el Camino de Pinares.
Así, inicialmente los actuantes encontraron una tableta de 100 gramos de hachís y más de 5.000 euros en el bolsillo del pantalón del copiloto, según ha informado la Policía Nacional a través de un comunicado.
Tras el registro completo del vehículo los agentes se incautaron de 80 tabletas similares a la aprehendida al copiloto ocultas en el interior de una bolsa en el maletero. Los dos ocupantes resultaron detenidos como presuntos responsables de un delito de tráfico de estupefacientes.
En total se incautaron de 8.110 gramos de hachís, 5.655 euros en efectivo y tres teléfonos móviles. El vehículo intervenido resultó ser propiedad de una empresa de alquiler. Los arrestados ya han sido puestos a disposición de la autoridad judicial competente.
Por otro lado, desde la Policía Nacional han recordado que el trabajo de los agentes en este tipo de controles es fundamental en el mantenimiento de la seguridad ciudadana pero también, como este caso, para el descubrimiento de delitos.
Por ello resulta importante no dar aviso de estos dispositivos cuando se encuentran en la vía pública, ni por teléfono ni en redes sociales, ya que conocer su ubicación puede ayudar a los delincuentes a eludir las acciones de los agentes de la autoridad.
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