Sus instalaciones cuentan con el comedor social ‘Virgen de la Acogida´, en el cual todos los días a las 13 h una cocinera y una ayudante preparan la comida para aquellas personas que necesiten ir a comer. También se les prepara una bolsa con unos bocadillos y bebidas para que tengan algo que llevarse a la boca por la noche.

Sin embargo para unas 50 familias con niños, a las que no les llega el sueldo para llegar a fin de mes, se les facilitan los ingredientes necesarios para que preparen las comidas en sus casas.

También cuentan con un servicio de ropería. Durante toda la semana recogen ropa que la gente las donan al centro y ellas las lavan y las arreglan para poder ponérsela a los más necesitados. Según la Hermana Superiora Sor Soledad Llamas a ellos les gusta mucho este servicio, "les gusta ir bien arreglados y peinados. Cuando llegan por primera vez les probamos la ropa, las arreglamos y las marcamos con las iniciales de cada uno, para que ellos se acostumbren a tener sus propias cosas y a cuidar de ellas".

Para que los más pobres puedan tener una higiene y un lugar donde asearse, los martes y los viernes, de 9 a 11h, ponen a su disposición duchas, gel, champú y toallas. Después les dan sus ropas limpias después de lavarlas y secarlas en maquinarias industriales. Aunque según las hermana superiora siempre hay que comprarles ropa interior para que se puedan cambiar.

Las hermanas, a través de una trabajadora social, les crean unas fichas a los más pobres para realizar un seguimiento de los problemas o adicciones que tiene y poder ayudarlos o reinsertarlos en la sociedad. "Algunos llegan quemados y cansados por los problemas que han tenido durante toda la vida. Sin embargo, otros vienen con muchas ganas de trabajar y cuando lo encuentran se quedan en una pensión y vuelven para darnos las gracias. El saber que ellos consiguen seguir adelante con sus vidas es lo que nos ayudar a seguir adelante, es la recompensa a nuestro trabajo".

Un refugio que las hermanas han creado para los más pobres, afrontando el gasto de los sueldos de los 6 profesionales que trabajan allí, gracias a al dinero de la comunidad. Aunque el Banco de Alimentos, el Ayuntamiento de Badajoz, la Diputación de Badajoz y los voluntarios les ayudan un poco. El dinero que dona la gente de buen corazón, llamando al 924221773, les ayuda a seguir con este "servicio de vida".

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