Por grupos y respecto al mes anterior, los precios han subido un 1,1 por ciento en Ocio y Cultura, un 0,8 por ciento en Vivienda, un 0,7 por ciento en Hoteles, Cafés y Restaurantes y una décima en Medicina, manteniéndose estables en Bebidas alcohólicas y tabaco, Menaje, Enseñanza y Comunicaciones.

Por el contrario, han descendido un 12,2 por ciento en Vestido y Calzado, un 0,7 en Alimentos y bebidas no alcohólicas y en el apartado Otros. También ha experimentado una disminución en Transporte (0,3 por ciento).

En relación a julio de 2017, los precios han subido en Aragón un 5,5 por ciento en Transporte, un 5,2 por ciento en Vivienda, un 2,8 por ciento en Comunicaciones, un 2,2 en Hoteles, Cafés y Restaurantes, un 1,8 por ciento en Bebidas alcohólias y calzado, un 1,5 por ciento en Alimentos y bebidas no alcohólicas, un 1,1 por ciento en Vestido y Calzado, un 1,2 por ciento en Medicina, un 0,8 por ciento en Menaje, un 0,7 por ciento en Enseñanza y un 0,2 por ciento en el apartado Otros. Han bajado un 0,7 por ciento en Ocio y Cultura.

DATOS NACIONALES

El Índice de Precios de Consumo (IPC) disminuyó un 0,7% en julio en relación al mes anterior y moderó una décima su tasa interanual, hasta el 2,2%, según los datos definitivos publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que coinciden con los avanzados a finales del mes pasado.

Estadística señala que en la moderación de la tasa interanual del IPC de julio ha influido principalmente el menor encarecimiento de los alimentos y bebidas no alcohólicas, especialmente por la bajada de los precios de pescado, marisco y aceites, y también por el descenso de los precios de los paquetes turísticos en relación al nivel de hace un año.

La tasa interanual de julio es la vigésimo tercera tasa positiva que encadena el IPC interanual e implica que los precios son hoy un 2,2% superiores a los de hace un año.

Tras haber registrado en enero una tasa interanual del 0,6%, la más baja en 16 meses, el IPC interanual volvió en febrero a superar el 1%, tendencia que se mantuvo en marzo y abril. En mayo ya se alcanzó la barrera del 2%, a la que no se llegaba desde abril de 2017.

La inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, bajó una décima en julio, hasta el 0,9%, con lo que se sitúa 1,3 puntos por debajo del IPC general.

En el séptimo mes del año, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa anual en el 2,3%, con lo que se mantiene respecto al mes de junio.