Las esperas para pasar el control de pasaportes en el aeropuerto londinense  de Heathrow llegaron el mes pasado a dos horas y media, según unas cifras obtenidas por la aerolínea Virgin Atlantic y divulgadas a los medios.

En casi todo julio, Inmigración (Border Force en inglés) no pudo cumplir con su objetivo de no superar los 45 minutos de espera para la mayoría de los viajeros procedentes de fuera del Área Económica Europea (AEE), según la compañía aérea, que ha indicado que los pasajeros se sienten "frustrados" por esta situación.

La semana pasada, el consejero delegado de British Airways (BA), Alex Cruz, criticó las largas filas que se forman en el control de inmigración de Heathrow y recalcó que el retraso en pasar por los controles migratorios es peor que en otras terminales del mundo.

Según la información divulgada este lunes, las filas más largas se formaron el 6 de julio cuando los pasajeros de fuera de la AEE -formada por 31 países- tuvieron que esperar dos horas y 36 minutos.

El consejero delegado de Virgin Atlantic, Craig Kreeger, señaló que, si bien la seguridad es la prioridad, otros países controlan sus fronteras mejor que el Reino Unido.

"En un momento en que el Reino Unido necesita demostrar que está abierto a los negocios, el Gobierno y Border Force (Inmigración) necesitan dar una primera gran impresión a cada visitante (al entrar en el Reino Unido", añadió el directivo.

Los ciudadanos de la Unión Europea (EU), de la AEE y Suiza pueden utilizar las puertas electrónicas en el control de pasaportes, pero los visitantes de otros países deben ser atendidos por un funcionario de inmigración.

El ministerio de Interior ha insistido en que ha reforzado Heathrow con la incorporación adicional de 200 personas en el control migratorio para aliviar la situación este verano.

Aún no está claro cómo se hará el control de inmigración para los ciudadanos comunitarios una vez que el Reino Unido salga de la UE a finales de marzo de 2019.