La detenida sustrajo la correspondencia del buzón de la víctima, consiguiendo de este modo una tarjeta de crédito que una entidad bancaria le enviaba.

Ya con la tarjeta en su poder, se dio de alta en una conocida página de Internet para la compra de productos, falsificando parte de los datos aportados y consiguiendo de este modo recibir los productos que adquiría, especialmente joyas.

También hizo recargas de telefonía móvil hasta sumar un total de 37 operaciones con las que estafó a la víctima más de 2.400 euros entre las recargas y compra de productos.

Con los datos de la tarjeta, así como con los conseguidos a través de la entidad bancaria y compras efectuadas, la Guardia Civil realizó un rastreo tanto de las operaciones como del sistema de recepción de los productos, consiguiendo de este modo identificar a la supuesta autora de la estafa y ponerla a disposición judicial.