La Asociación de Profesionales de los Centros de Información a la Mujer (Asocim) de Galicia han expresado su respaldo a Juana Rivas y han mostrado su "perplejidad" ante una sentencia que envía "un mensaje terrible y desolador a las mujeres víctimas de violencia de género".

El colectivo ha emitido un comunicado este sábado, un día después de conocerse el fallo judicial contra Juana Rivas, la madre de Maracena (Granada) condenada a dos años y medio por la sustracción de cada uno de sus hijos y a seis años de inhabilitación de la patria potestad.

Asocim expresa su repulsa por una sentencia que "evidencia el arraigo" en España "de la justicia patriarcal y de la violencia institucional contra las víctimas de la violencia de género", al tiempo que exclaman su "perplejidad" e "indignación" ante un fallo judicial "que recoge reflexiones de carácter personal, algunas de ellas negativas y despectivas hacia Rivas, y con un enorme sesgo de género a la hora de juzgar el caso".

"Gran parte de la sentencia se centra en negar que Juana Rivas haya sido una víctima de la violencia de género para luego exponer que la denuncia que presentó en 2016 contra su expareja no era más que una estrategia para hacerse con la custodia de los menores", continúa la asociación.

Así, cree que las afirmaciones que contiene la sentencia evidencian "el total desconocimiento del magistrado sobre la violencia de género y la delicada y compleja configuración de las relaciones entre víctimas y maltratadores", al tiempo que censuran que el juez sostenga que Rivas empleó los malos tratos como una vía para "obtener ventajas procesuales".

En esta línea, Asocim denuncia que la resolución está "llena de prejuicios basados en los estereotipos de género" y que el "colofón" al "cúmulo de despropósitos" de la sentencia es que el juez decida "desestimar los informes psicológicos que el CIM de Maracena hizo tanto de Juana Rivas como de su hijo mayor".

"La decisión que tomó Rivas nació de la necesidad y de la voluntad de proteger a sus hijos de un padre maltratador pero, pese a eso, la sentencia establece que no podrá tener la custodia de sus hijos durante seis años, una medida injusta y desproporcionada que más parece un castigo a la madre que una consideración en base a las necesidades de unos menores que, lamentablemente, volverán a las manos de un padre maltratador", añade.

FORMACIÓN

Así las cosas, el colectivo de profesionales de los CIM gallegos reclaman que sus informes sean tenidos en cuenta por los magistrados, ya que están avalados por abogados y psicólogos con formación en materia de igualdad de género, algo que echan en falta en los jueces.

Por lo tanto, reclaman que se forme en "perspectiva de género" a los miembros de la judicatura e instan a los dirigentes públicos a "tomar medidas" y "activar reformas urgentes para mejorar y asegurar la protección de las mujeres maltratadas y de los menores".