Este proyecto, en el que se incurrieron los estudiantes, tiene como fin sensibilizar a los ciudadanos con la problemática referida a la generación de residuos en Canarias con el reciclaje de bolígrafos, rotuladores, correctores y demás instrumentos de escritura inservibles, según han informado los estudiantes del IES Politécnico de Las Palmas que participan en el mismo.

Así esta segunda recogida de instrumentos de escritura inservibles en la que han recogido una tonelada de residuos, la han llevado a cabo en los centros educativos no universitarios de las islas de Gran Canaria, Tenerife y Lanzarote, lo que les ha permitido superar en más de media tonelada la cantidad de residuo acopiada en la campaña anterior.

Además este curso han contado también con la colaboración de las escuelas y facultades de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), así como de empresas y entidades privadas que han querido sumarse a esta iniciativa.

Ahora, añaden, los más de 300 contenedores con bolígrafos, correctores, rotuladores, subrayadores y otros elementos de escritura de plástico y/o metal que han llegado al final de su vida útil serán trasladados por la empresa gestora de residuos Martínez Cano Canarias a Barcelona "gracias a la colaboración de la Consejería de Medioambiente y Emergencias del Cabildo de Gran Canaria que, este curso, cubre todos los gastos de envío".

Posteriormente, tras llegar a Barcelona, la compañía TerraCycle será la encargada de que estos residuos lleguen a la recicladora más próxima, ubicada en Francia, y la empresa BIC de financiar el coste del reciclaje.

Al respecto, señalan que hasta este momento "esta es la única forma" que tiene Canarias de colaborar con el programa TerraCycle-BIC para el reciclaje de elementos de escritura desechados que opera en España desde el 2011 y "en el que quedan excluidas" Canarias, además de Baleares, Ceuta y Melilla debido al coste económico que supone el traslado desde estas regiones a la Península.

De todos modos, los jóvenes tienen como objetivo para el próximo curso poder trasladar la iniciativa a todo el archipiélago, así como dotar a todas las bibliotecas municipales e insulares con contenedores disponibles para la ciudadanía.

Finalmente, exponen que a través de este proyecto y de la concienciación de la sociedad, quizás se acerquen "cada vez más a la recuperación de la misma cantidad de residuos que de instrumentos de escritura se introducen en Canarias" y que cifran a la "poco despreciable" de 700 toneladas en 2017.