Carlos Vives: "Somos unos románticos empedernidos e irreparables"

  • Este 24 de julio actuará el artista en las Noches del Botánico; el 25, en Barcelona; y el 26, en Santander.
El artista colombiano Carlos Vives
El artista colombiano Carlos Vives
ARCHIVO
El artista colombiano Carlos Vives

«No tengo tiempo para hablar de lo que nos separa. Mis canciones hablan de lo que nos une y nos conecta. No tengo tiempo para hablar de muros», nos dice Carlos Vives (Santa Marta, 1961), que hoy actuará en las Noches del Botánico; mañana, en Barcelona y al día siguiente en Santander. Nos atiende a pesar de estar en plena gira –Vives Tour– y no tener apenas tiempo.

Tiene claro que la gratitud es fundamental y lo expresa abiertamente para quienes le abrieron los brazos y las puertas cuando todo eran portazos: «Es muy especial para mí España. Cuando empezamos, en esos años, había mucha reticencia hacia lo que hacíamos. Pensaban que mi proyecto no iba a funcionar».

España se desmarcó de aquel escepticismo y acogió a este artista que hoy es un referente mundial: «Había dudas sobre lo que estábamos haciendo, y entonces nuestra música llamó la atención en España. Que lo nuestro funcionara en esta tierra fue una auténtica lección».

Aquellos primeros años fueron tan complicados para el artista que luego cosecharía éxitos tan brutales como Fruta fresca o La Bicicleta, el dueto con Shakira, que ni siquiera tenía discográfica. No parece sin embargo, o ya saldó con creces las cuentas, que guarde mucho rencor a quienes no creyeron en él. O solo guarda el que cabe en una frase que enuncia con cierto sarcasmo: "Hombres de poca fe... Se equivocaron otra vez, hijos".

Sí que confiesa que no entendía qué pasaba para que se rechazara de ese modo lo que hacía. Una música que le hacía y le hace feliz, de ahí que resistiera los malos tiempos: "Nos daba y nos da felicidad hacer lo que hacemos. Y está muy relacionado, porque el origen de los ballenatos, cumbias, es ese: la felicidad".

Fue en sus orígenes una música despreciada y subestimada: "!Como que era música de pueblo, y yo heredé un poco ese desprecio". Algo que le hizo más fuerte: "Eso me fortaleció. Para mí era una forma de conexión con ese paraíso perdido. Cuando decidimos hacer nuestra música nos decían: ese no es el camino, es una música muy pobre".

Aparte del paraíso perdido y recuperado, de los vínculos con la esencia, hay también en lo que hace mucho de amor: "Yo vengo del Caribe y estamos educados en el bolero". La canción de amor por excelencia, y una inyección ya para siempre de amor en quienes, así lo defiende y demuestra con sus temas, Vives.

"El bolero no solo es romántico, es adoración a la mujer, a la familia, a los hijos, a la tierra. Eso hace que seamos unos románticos empedernidos, irreparables. Y de un feminismo exacerbado".

Ha empezado contándonos para lo que no tiempo para hablar. ¿Y para cantar, a qué no cantaría nunca? "No hablaría mal de la mujer ni de las diferencias, hablaría y hablo siempre de igualdad, no hablaría de lo que privilegian en todas partes. Hay cosas que em impactan ed la música que escucho hoy que es machista. No cosificaría a la mujer, eso es todo lo contrario a lo que es mi escuela. No me gusta la múica excluyente ni que hablen mal de otra cultura o denigren a la gente. No haría esa música".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento