Rivas ha entrado al edificio judicial sobre las 9,15 horas rodeada de una nube de periodistas y acompañada del abogado que ha llevado su caso y que ella quería que la defendiera en el juicio desde un principio, José Estanislao López, que ha pedido el alta voluntaria respecto a los problemas de salud que padece y que le impidieron acudir a la vista oral fijada el pasado 14 de junio, la cual fue suspendida.

La Fiscalía solicita para Juana Rivas un total de cinco años de prisión por dos delitos de sustracción de menores y también pide que sea inhabilitada durante seis años para ejercer el derecho de patria potestad sobre los niños, de once y tres años.

La expareja de Juana Rivas, Francesco Arcuri, está personado en la causa como acusación particular y la previsión es que declare por videoconferencia en el juicio de este miércoles.

Ha solicitado para ella cinco años de prisión y ocho años de inhabilitación para ejercer la patria potestad sobre los niños. En concepto de responsabilidad civil, el padre de los menores reclama que su expareja le abone por los "daños materiales y morales ocasionados" una indemnización de 30.000 euros.