El expresidente de la Comisión Europea y excomisario Joaquín Almunia ha argumentado que la Unión Europea debe dotarse de una política común de inmigración, con reglas claras, mecanismos e infraestructuras compartidas, y apostar por avanzar aunque no sea con unanimidad.

Esta es una de las propuestas que el dirigente socialista ha expuesto en la presentación de un informe sobre El futuro de la UE, elaborado por el Real Instituto Elcano, que ha considerado una "buena propuesta" española al debate sobre qué debe hacer la Unión Europea tras el brexit.

Almunia ha apostado por seguir avanzando y profundizando en la Unión para lograr que los 27 miembros actúen con una sola voz, especialmente ante retos como la inmigración o la guerra comercial lanzada por Estados Unidos.

Para ello ha considerado necesario "acabar con la ineficacia absoluta de la unanimidad": "Si a 28 no se puede avanzar, no tenemos por qué esperar hasta que el último decida subirse al vagón", ha dicho.

Sólo así se podrá hacer frente a retos como el "deterioro de la democracia, no solo entre nuestros socios, sino en Estados Unidos", ha subrayado.

En materia de inmigración, el expresidente de la Comisión ha señalado que "ante el reto de África, debemos ser abanderados de una real toma de conciencia para que África sea un buen interlocutor y no un foco de miedo a la inmigración", para lo que es imprescindible que Europa actúe de forma unitaria.

También en la guerra comercial es necesario que la UE dé la batalla y no se quede como mero espectador de la guerra desatada entre Estados Unidos y China, ha planteado.

Por su parte, la exvicepresidenta del Parlamento Europeo y exministra de Exteriores, Ana Palacio, ha señalado que "antes, el relato europeo era integrarse para lograr una mayor prosperidad, pero la crisis económica nos ha dejado sin relato", lo que nos obliga a repensar "para qué construir Europa" y comprender que la prosperidad "no es un fin en si mismo, sino un instrumento para la paz".

Así, a los asuntos analizados en el informe, Palacio añadiría la importancia de que Europa sea capaz de hablar con una sola voz en el mundo, especialmente en materia internacional y en asuntos de defensa, especialmente una vez que ha desaparecido "el paraguas protector" de Estados Unidos.

"No tiene sentido seguir actuando de forma unitaria y por países y no como una verdadera unión", ha argumentado, planteando la necesidad de una profunda reforma institucional, una posición clara en materia comercial y la importancia de contar con una defensa propia.

Con el objetivo de contribuir a la obligada reflexión sobre el futuro de la UE y los desafíos que debe afrontar, Elcano ha analizado siete de los principales retos y elaborado una serie de conclusiones y recomendaciones.

Bajo la premisa de que "la Unión debe estar al servicio de sus ciudadanos y sus necesidades y que cualquier reforma debe mantener esto como su objetivo", el informe analiza asuntos como la reforma política, la inmigración, los mercados y las políticas de defensa y de exteriores y propone unas recomendaciones "ambiciosas pero creíbles" para afrontarlos