A causa de estos hechos, se ha detenido a dos personas como presuntas autoras de un delito contra la salud pública por actos de cultivo y otro de defraudación del fluido eléctrico, han informado desde la Comandancia de la Guardia Civil de Zaragoza en una nota de prensa.

La operación se inició en el mes de mayo ante la sospecha de que se estaba cultivando cannabis en el interior de una vivienda de Gallur.

La investigación realizada por los agentes logró obtener la identidad de los dos moradores del inmueble, en régimen de alquiler, y que carecerían de la contratación de suministro de luz a pesar de la presencia de numerosos aparatos de aireación de grandes dimensiones que estaban en funcionamiento las 24 horas del día.

Además, se obtuvieron numerosos indicios que evidenciaban que en el interior de la finca podría estar cultivándose marihuana. Por este motivo, en la mañana del pasado martes, 3 de julio, la Guardia Civil llevó a cabo un registro en dicho lugar.

En él, se pudo observar que se trataba de dos viviendas unidas por un pasillo central, con una extensión de habitabilidad de 300 metros cuadrados, encontrándose casi la totalidad de las estancias perfectamente acondicionadas para el cultivo de cannabis sátiva.

PRODUCCIÓN CONTINUA

Esta plantación contaba con un completo sistema de iluminación, ventilación, riego y acondicionamiento, fabricado expresamente para el cultivo de esta sustancia y para mantener un sistema de producción continua con el que se podrían obtener varias cosechas al año.

En dicho inmueble, fueron intervenidas un total de 1.906 plantas de cannabis, en estado de crecimiento, con una altura de un metro aproximadamente y completamente cogolladas, 41 ventiladores, cinco aparatos de aire acondicionado y cien placas de luz.

Además, se incautaron 27 garrafas de fertilizantes, 38 cajas de otros productos de la misma categoría, ocho cajas de ambientadores, 18 botellas de 'ph' y 50 sacos, de 50 kilogramos de capacidad cada uno, de tierra para cultivo.

Durante la inspección de la parcela, se pudo constatar que los inquilinos habrían efectuado la toma de luz de corriente eléctrica para el suministro de la vivienda, de manera fraudulenta, tomándola del alumbrado público, hecho que se puso en conocimiento de personal técnico de Eléctricas Zaragoza, quienes se personaron en el lugar para llevar a cabo las actuaciones correspondientes.

Por todo lo anterior, los dos moradores de la vivienda, un hombre y una mujer, de 53 y 49 años y nacionalidad española, fueron detenidos por un presunto delito contra la salud pública por actos de cultivo y otro de defraudación de fluido eléctrico. Quedaron a disposición judicial durante este miércoles.