Así se ha pronunciado Estañ en declaraciones a los medios en Les Corts, donde ha recordado las líneas rojas establecidas en el Acord del Botànic como reacción ante una sociedad "harta de años de corrupción". "Parece que ha habido una rebaja en la contundencia", ha dicho al ser preguntado por la actitud de Compromís, y "eso da muy mala imagen de la institución y del compromiso de los partidos".

Sobre el futuro de Divalterra, ha señalado que si bien "no se puede entrar como elefante en una cacharrería", Podemos lleva proponiendo su liquidación desde 2016 y no ha sido prioritario debatir sobre la gestión o el papel de esta empresa pública.

Ahora, ha proseguido, con "un caso de corrupción que repite los patrones de Imelsa", considera que el nuevo gobierno provincial debe "acabar con Divalterra de la forma más ordenada posible" porque "tiempo ha habido suficiente", y se debe trabajar en vaciar de competencias la corporación hasta conseguir su eliminación.