La regidora de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal del Ayuntamiento de Palma, Neus Truyol, y el presidente de PIME, Jordi Mora, han informado acerca de la nueva normativa estatal que exige cobrar obligatoriamente las bolsas de plástico de un solo uso que se distribuyan en los comercios.

Este Real Decreto, aprobado en mayo de 2018 y que entró en vigor el pasado 1 de julio, pretende fomentar el uso de bolsas alternativas entre los comerciantes y consumidores, y reducir así el consumo de este tipo de bolsas.

Tal y como han indicado esta mañana en una rueda de prensa, los comerciantes, que podrán elegir libremente el precio de sus bolsas, deberán tener visible la existencia de este Real Decreto, así como la información del precio de venta de las bolsas.

El Real Decreto establece unos precios orientativos, como cobrar cinco céntimos por las bolsas ligeras inferiores a 15 micras y cobrar 15 céntimos por las bolsas entre 15 o más de 50 micras.

Cort considera que esta medida llega muy tarde e intentará que el próximo 1 de enero de 2019 entre en vigor una normativa que prohíba la distribución de bolsas de plástico no degradables en los comercios. "Los plásticos tienen los días contados", ha afirmado Truyol.

Jordi Mora considera que aún es temprano para hacer balance, pero intuye cierta sensibilización para cambiar los hábitos de consumo, que es uno de los objetivos principales de la campaña fomentada por el consistorio.

DÍA INTERNACIONAL DE LAS BOLSAS DE PLÁSTICO

Truyol ha aprovechado este día para recordar los impactos negativos que produce este tipo de material. "En Europa, el 90 por ciento de los plásticos acaban siendo incinerados o acaban en espacios medioambientales", ha añadido la presidenta de Emaya.

Además, ha señalado que los plásticos tardan hasta 500 años en degradarse, lo que supone un problema para las generaciones futuras, y que el 80 por ciento de los residuos que se encuentran en el mar son residuos plásticos. Se calcula que, en Europa, cada familia consume unas 40 bolsas al mes.