Una solemne procesión acompañó ayer por las calles de Valencia a la imagen de madera plateada de San Vicente Mártir, patrón de la ciudad. El motivo fue la festividad que lleva su nombre y que recuerda el martirio al que fue sometido en los inicios del cristianismo. El recorrido comenzó por la mañana en la plaza de la Reina y siguió por la calle del Mar, Avellanas, plaza del Arzobispo y de la Almoina. El acto religioso concluyó en la catedral con una misa.