En Caldones, por ejemplo, cerca del 70% de los vecinos, unos 250, están sin televisión. María Jesús Bárcena, representante vecinal, indica que no les llega ningún canal con nitidez y «la Primera de TVE es la que peor se ve de todas».

La causa, según dice María Jesús, es que en parroquias como Caldones o Leorio faltan repetidores de señal, pero como es una zona muy extensa, montañosa y con poca densidad de población, «habrá que esperar. No somos prioritarios para que nos los instalen», critica.

En el pueblo de La Piquera, en el barrio de Jove, tan sólo se reciben la Primera y La 2, el resto se ve mal o no se ve. Tal como señala José Baragaño, presidente de la Asociación de Vecinos Santa Cruz de Jove, el pueblo está situado entre dos montañas «y ahí no llegan las ondas».

Recuerda que «vino un técnico para ver la situación y nos dijo que no hay nada que hacer a no ser que cada vecino se decida a instalar la televisión digital y pagarla de su bolsillo», indica. Sin embargo, José Roberto Fernández Caspio, que vive en La Piquera, no cree que esa respuesta sea suficiente, ya que «estamos en el siglo xxi y los vecinos tenemos nuestros derechos», protesta.

En la zona rural de Roces, al sur de la ciudad, también tienen problemas: los vecinos se quejan de que varios canales se ven borrosos «y la Sexta ni siquiera se puede sintonizar», lamenta Elena Medina, representante vecinal del barrio.