La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el comisionado de Seguridad, Amadeu Recasens, han presentado este lunes parte de los 145 vehículos híbridos nuevos de la flota de turismo patrulla que sustituirán prácticamente la totalidad de los actuales, que funcionan con diésel.

En un acto en el Port de la Marina, Colau y Recasens han visto el centenar de turismos que se estrenarán este junio, y el resto, 45 más, se incorporarán a finales de año, en una operación con una inversión de 12,6 millones, pero que prevé un ahorro de 608 euros al año en combustible por vehículo.

"Barcelona es una ciudad global con temas de gestión cada día más complejos. Necesitamos una Guardia Urbana cada vez más equipada", ha dicho Colau, que ha celebrado que los coches estén hechos en la capital catalana y hayan pasado distintas pruebas piloto para comprobar su idoneidad.

La primera edil también ha destacado que los nuevos coches contribuyen a la eficacia y eficiencia ambiental: "Se ha aprovechado para incluir navegadores que hacen del vehículo una comisaría móvil", y ha subrayado que la gestión de datos desde el turismo será más rápido que nunca.

Los coches, Toyota Prius, tienen un ordenador de a bordo que actualiza y envía información de forma inmediata, además de programar señales acústicos y lumínicos y conectarse con las bases de datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), la base de antecedentes penales y el padrón municipal.

Asimismo, 12 de los nuevos turismos cuentan con cámaras laterales que permiten captar matrículas de vehículos parados o en movimientos para saber si han sido robados o si están en la base de datos de la policía por alguna razón, además de llevar mejoras en el GPS.

También disponen de habitáculos para transportar detenidos con cámaras interiores, así como de un kit de asistencia médica con desfibrilador y sistema de auxilio básico, y los agentes han recibido formación específica para actuar en emergencias médicas.

La Guardia Urbana dispone de una flota de 526 vehículos, de los cuales, hasta ahora, sólo nueve turismos eran híbridos, y a finales de 2018 el cuerpo prevé contar con 154 coches híbridos y sólo 19 diésel, al que se suma otro turismo con el motor totalmente eléctrico.

En total, el objetivo es que, en 2019, la flota de la Urbana esté compuesta por 300 vehículos híbridos o eléctricos y 200 de combustión, ya que en julio de 2017 el cuerpo ya incorporó 30 escúters eléctricos, y este 2018 también se sustituirán siete motos trail de gasolina por otras eléctricas.