Y si no que se lo pregunten a los pasajeros de Iberia que volaron por la mañana de Madrid a Hondarribia (Guipúzcoa). El avión volvió a Barajas a mitad camino porque no había manera de aterrizar en Euskadi, según informa Aena. También un carguero con destino al aeropuerto de Loiu se desvió a Foronda (Álava) y un Air Nostrum tomó tierra en Pamplona en vez de en Hondarribia.
Los bomberos de Bilbao realizaron ayer siete salidas por el vendaval. No fue tan mal, teniendo en cuenta que el martes llegaron a 22. Tuvieron que apagar un incendio de una cabaña en el monte Serantes y apuntalar bien varios tejados, canalones y andamios que andaban medios sueltos por la ventolera.
La mayor fuerza del viento se registró en Punta Galea y Bermeo, donde llegó a los citados 120 km/h. Bilbao está más protegido: los bomberos sólo registraron una velocidad máxima de 60 km/h.
Hoy ya no habrá viento fuerte y las temperaturas subirán. Eso sí, lloverá persistentemente. Mañana, nublado, y el fin de semana, sol.
«El contenedor salió volando»
Cómo le gustan las esquinas y los recovecos al viento. Ahí se hace grande. En el panorama bilbaíno por la mañana, una mujer se aferraba atónita a un contenedor impulsado por el viento, entre las calles Simón Bolivar y Sabino Arana. «¡Qué susto! ¡Creí que me llevaba volando!», exclamaba cuando logró salir del laberinto ventolero. Fue un mal día ayer para la gente menuda, los niños, los bien peinados, los que llevan peluquín y los trabajadores del andamio. Pero buena suerte para los surfistas intrépidos. El martes el mar comenzó a arreciar con olas de unos cinco metros. Ayer llegaron a picos de ocho.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios