El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) -organismo consultor de la Unesco- ha emitido su informe en el que valora la restauración del Puente Romano y en el que concluye que "los valores universales" del monumento no han sido modificados, si bien la obra se podría haber realizado "alterando menos la imagen".

El informe es el resultado de una petición del pleno municipal del 5 de diciembre de 2006 en la que se acordó solicitar a Icomos un estudio sobre "la idoneidad" de utilizar granito rosa para el pavimento, algo que había generado un debate político y social.

Otra de las cuestiones sobre las que el Ayuntamiento solicitó la opinión a este organismo, además del adoquinado, fue sobre los sistemas de iluminación con los que cuenta el puente tras su restauración, una infraestructura que volvió a abrirse al público el pasado miércoles.

Autenticidad histórica

En sus consideraciones, Icomos recalca que "la autenticidad e integridad materiales e históricas" del bien "no se han mermado por la intervención", una obra con siete fases que está llevando a cabo la Consejería de Obras Públicas.

De hecho, reconoce que el conocimiento actual sobre el monumento "es mucho más profundo" que el existente antes de la obra y que "las decisiones para la consolidación y corrección de las patologías" de la pasarela se han basado "en estudios adecuados en lo técnico y en la metodología adecuada".

Respecto al granito rosa, Icomos considera que el material utilizado "es muy común" en la ciudad y que la "apariencia de material nuevo" actual "menguará en cuanto el proceso de meteorización de esta roca actúe y asimile los tonos de la piedra a otros existentes" en la capital.

En cuanto a la iluminación, el organismo destaca que tienen "un diseño sobrio y no falto de elegancia", si bien advierte que "probablemente no sea el más adecuado a las circunstancias de vandalismo urbano frecuente en las ciudades españolas", que lo convierten en un objetivo "fácil de estropear y caro de reponer".

El informe de Icomos se detiene en el debate social generado por esta intervención y recalca que la elaboración de un diseño "más parecido al existente antes de la intervención, habría supuesto un impacto mucho menor y habría permitido que la población lo asimilase mucho más fácilmente".

Consulte aquí el informe íntegro elaborado por Icomos

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