A la reina le gusta el teatro. Este fin de semana lo ha demostrado. El viernes la reina Letizia estuvo en la final del concurso de monólogos científicos Famelab 2017. Y sábado acudió a la representación del musical Billy Elliot con sus dos hijas, su madre y la reina Sofía, así como con las hijas de las infantas Elena y Cristina.

En la víspera de su viaje a Haití y la República Dominicana para visitar proyectos españoles de cooperación para el desarrollo, doña Letizia dedicó la tarde a esta función del teatro musical basado en la célebre película sobre el niño británico que soñaba con ser bailarín.

La princesa Leonor y la infanta Sofía disfrutaron así del musical acompañadas no solo por su madre, sino también por sus abuelas, la reina Sofía y Paloma Rocasolano, y por sus primas Victoria Federica Marichalar e Irene Urdangarin, junto a las que posaron a la salida del teatro para los numerosos reporteros gráficos que aguardaban ante la entrada.

Es la primera vez que se veía juntas en público a la reina Letizia, doña Sofía, la princesa Leonor y su hermana desde que las cuatro visitaron con el Rey a don Juan Carlos durante su última hospitalización, después de las polémicas imágenes tomadas una semana antes sobre el aparente desencuentro a la salida de la misa de Pascua en la catedral de Palma.

Eso fue el sábado, porque el viernes doña Letizia también estuvo pendiente de otro escenario; escenario al que esta vez hasta se subió. Junto a Felipe VI, la reina presenció la final del concurso de monólogos científicos Famelab 2017, en una velada celebrada en la Sala Galileo Galilei de Madrid en la que, entre aplausos y carcajadas, disfrutaron con los relatos en clave de humor de los distintos participantes.

Llegaron vestidos de manera informal para no ‘desentonar’ en el ambiente festivo de la gala, que se prolongó durante más de hora y media. La final, amenizada por Ana Morgades, reunió a ochos participantes, de ellos, tres mujeres, cuyos relatos versaron sobre materias tan variadas como la medicina, las matemáticas o la cristalografía.

Vestidos de manera informal, el Rey acudió sin corbata y Doña Letizia estrenó una nueva pieza de moda española para su armario. Un traje de dos piezas blanco firmado por Pedro del Hierro que celebra su 30 aniversario. Es la primera vez que la reina ha confiado en esta marca madrileña de la que ha elegido un pantalón de talle ancho y cuerpo de bajo asimétrico con escote cruzado tanto por delante como por la espalda, que dejaba al aire una pequeña parte de la zona lumbar.

Los científicos condimentaron sus explicaciones con ironías sobre asuntos de actualidad, entre ellos, el mal papel de España en el reciente festival de Eurovisión o el máster y las cremas de la expresidenta de Madrid Cristina Cifuentes. Como en ediciones previas, no faltaron las alusiones al bajo índice de inversión en ciencia que hay en España,

Después de que disfrutara con el título europeo del Atlético de Madrid en Lyon (Francia), el Rey volvió a estirar la jornada para pasar con su esposa un rato distendido y coronar el concurso de divulgación científica, cuyo ganador fue el matemático y físico madrileño Juan Margalef, con su disertación sobre cómo preguntas sin aparente relevancia han dado pie a nuevas ramas de la ciencia.

Don Felipe y doña Sofía subieron al escenario para hacerle entrega del ‘cheque’ con el que participará en la gran final prevista en junio en el Reino Unido en pugna con los vencedores de los otros 30 países que toman parte en Famelab.