A través de esta actuación se pondrán a disposición de los santanderinos 1.500 metros cuadrados, como anticipo de los terrenos que ganará la ciudad con el proyecto de integración ferroviaria, destaca el Ayuntamiento en nota de prensa.

El próximo paso será el acondicionamiento de estos terrenos para uso público, según ha señalado el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, quien ha apuntado que el Ayuntamiento tiene "prácticamente ultimado el proyecto y lo presentará en breves fechas".

El proceso de integración ferroviaria conlleva, en total, la puesta a disposición de la ciudad de 84.600 metros cuadrados de superficie.

Díaz ha resaltado la implicación del Ministerio de Fomento para llevar a cabo "una actuación estratégica que permitirá mejorar notablemente la calidad de vida en el entorno de Castilla-Hermida y la calle Alta".

Añade que con ello, se da también un nuevo paso en la línea de colaboración mantenida con el Gobierno central para sumar nuevos espacios para el uso ciudadano en lugares emblemáticos de Santander.

Así, ha recordado los más de 75.000 metros cuadrados incorporados a la ciudad en su frente marítimo o los 100.000 metros cuadrados del parque de La Remonta.

Los trabajos para liberar estos 1.500 metros cuadrados con los que se inicia el proceso de integración ferroviaria comenzaron el pasado mes de diciembre con el derribo del edificio situado en el número 18-A en la calle Castilla, destinado en su día a residencia de vacaciones.

Después, continuaron con la demolición de la antigua nave de mantenimiento, en el número 18-C, y por último, se ha derribado el número 18-B, una construcción de 600 metros cuadrados, destinada a oficinas, que fue previamente desocupada trasladando al personal a unas nuevas instalaciones en la estación de Feve.