Los servicios de emergencias, que continuaron con las labores de extinción hasta las primeras horas de la tarde, dieron por finalizada su intervención después de sofocar el fuego, retirar los escombros y enfriar la zona.

Según los datos facilitados al 112, ninguna persona resultó herida ni se produjeron daños ambientales, aunque el servicio de guardacostas de Galicia activó, en fase de alerta, el plan para evitar que hubiese afectación al río Umia.

El grupo de apoyo logístico de la Axencia Galega de Emerxencias colaboró durante toda la noche en las tareas de extinción. Así, un camión nodriza apoyó en el suministro de agua a los servicios de emergencias allí desplazados. Según se le indicó al 112, empleó un total de 80.000 litros de agua durante su intervención.

El 112 recibió la alerta del incendio a través de la llamada de un particular, sobre las 00,00 horas de la madrugada. A partir de ahí, puso en marcha un operativo en el que participaron, además de los bomberos de O Salnés, de O Morrazo, de O Baixo Miño, de Pontevedra y el GALI, los miembros del GES y de Protección Civil de los ayuntamientos de Caldas, A Estrada y Padrón.

La intervención de los agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local también fue requerida por el 112. Además, una ambulancia del 061-Urxencias Sanitarias se desplazó hasta el lugar, por si fuera precisa su intervención. Del mismo modo, se informó de la situación al personal del servicio de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia y al Servicio de Guardacostas de Galicia.

A primera hora de la mañana, efectivos de Protección Civil de Caldas indicaron al 112 que no habían encontrado residuos en el río, ni tampoco restos del agua empleada en la extinción en las alcantarillas.