Durante este periodo se han ofrecido alrededor de un centenar de muestras, como ha asegurado el presidente del patronato del centro, Francisco Vázquez. Entre ellas, aproximadamente treinta han correspondido a la obra del autor tureganense.

Vázquez ha destacado la labor de investigación que también lleva a cabo el museo, así como la organización de ciclos multidisciplinares y la oferta educativa "para todas las edades".

En cuanto a Navarro, Vázquez lo ha calificado como uno de los máximos exponentes escultóricos del panorama nacional y ha recalcado que su montaje "dialogará" en la sala 5 con piezas de Esteban Vicente, pertenecientes a la colección del museo.

Miquel Navarro ha reconocido "cierta sintonía creativa" con Vicente y ha argumentado que su 'Ciudad Roja' es "metafísica". En ella no aparece el ser humano y sí un componente de intemporalidad, lo que hace que pueda tratarse desde una urbe del antiguo Egipto hasta una de "nuestros días". En ese sentido, ha usado el ejemplo del Alcázar para explicar el crecimiento de las ciudades, con la superposición de estratos de diferentes épocas y culturas.

Su propuesta es la de una ciudad "de alienación", que parece militar, aunque "uno se puede inventar lo que quiera". Está confeccionada a base de hierro colado nodular en fundición, con gran presencia vertical.

Por su parte, la directora del museo, Ana Doldán, ha incidido en que Navarro es miembro electo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Dos décadas después de la fundación del centro por parte de Esteban Vicente, el pintor "aún nos acompaña". No en vano, sus cenizas reposan en el espacio.