El hallazgo se produjo a primera hora de ayer por la tarde en el hotel Cano, ubicado en el número 53 de la calle Zoa, en el casco antiguo de Torrevieja.
Con dos pilas de petaca
Según relató el obrero, al mover una plancha de madera de un falso techo de un cuarto de baño observó «un paquete» con «dos pilas de petaca» y cables de plástico deteriorados.
Sin dudarlo, lo trasladó hasta el garaje del hotel, y desde allí se puso en contacto con a la Guardia Civil para alertarles del hallazgo.
Minutos después, especialistas del TEDAX, ayudados por perros adiestrados, retiraron el artefacto de forma controlada y sin incidentes, según fuentes cercanas a las investigación.
La bomba contenía 300 gramos de pólvora con un alto porcentaje de aluminio y estaba conectada a temporizadores de fabricación casera, según las mismas fuentes consultadas.
La mencionada reforma del establecimiento hotelero se inició a finales del pasado año, después de que un incendio, originado por un cortocircuito, dañara algunas dependencias del hotel.
La banda terrorista no ha dejado de azotar la provincia desde 2002 cuando mató a dos personas, una de ellas una niña de seis años, en Santa Pola.
Un año más tarde colocó sendas bombas en dos hoteles, de Alicante y de Benidorm, y provocó una decena de heridos. En Dénia también explotó otro artefacto.
Explotaron otras dos en 1991
El 24 de mayo de 1991 una llamada anónima en nombre de ETA alertó de la colocación de tres artefactos explosivos, uno en un restaurante de Santa Pola y otros dos en sendos hoteles de Torrevieja, uno de ellos el hotel Cano. Los dos primeros artefactos explotaron sin causar daños personales, mientras que el tercero no fue localizado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a pesar de las seis horas de búsqueda.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios