Además había un pequeño perro en el interior de la vivienda en «estado deplorable» que fue trasladado a la Sociedad Protectora de Animales de Alicante, según publicó ayer el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
La resistencia a prestar colaboración con las autoridades sanitarias se considera una infracción grave y sancionable con una multa que va de los 3.000 a 15.000 euros. La Concejalía de Sanidad advierte de la falta de limpieza y de los malos olores que se producen en el citado domicilio a raíz de una denuncia presentada por un vecino.
La Policía Local intentó acceder al interior de la vivienda y no obtuvo respuesta, aunque asegura que desde la escalera no se perciben los olores denunciados. Dejó un aviso de visita, pero el dueño de la casa no se ha puesto en contacto con la Concejalía de Sanidad aún.
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