La empresa alemana Memminger Feine Cabrios, especializada en Beetle clásicos, los llamados Escarabajos, ha decidido crear una edición especial del Volkswagen Beetle que se ha convertido en una sensación de internet.
Es el Roadster 2.7, en referencia a la cilindrada de su motor, que cambia de posición, ahora central (detrás de los asientos delanteros), acoplado a una caja de cambios manual de 5 velocidades.
Un motor que es un bloque bóxer refrigerado por aire que se inspira en los Type 4 que montaban los Volkswagen 411 y 412, por lo que ahora este propulsor tiene una potencia de 210 caballos y un par de 247 Nm y permite superar los 200 kilómetros/hora.
También se ha acortado la longitud total en comparación con un Escarabajo clásico y también aumentó el ancho considerablemente, pasando el coche a medir 4 metros y a pesar solo 800 kilos.
En cuanto a la estética, este modelo tiene una imagen bastante agresiva.
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