El Servicio Madrileño de Salud (SERMAS) indemnizará con 80.000 euros a los hijos de M.G.S., un hombre fallecido en el Hospital La Paz a consecuencia de una deficiente asistencia y por recibir el alta "indebidamente" pese a presentar signos de una importante infección que le condujo a un fracaso multiorgánico.

Así lo establece un acuerdo económico alcanzado en vía contencioso-administrativa con la Administración sanitaria madrileña, según informó hoy la asociación ´El Defensor del Paciente´, encargada de defender los intereses de la familia de la víctima.

De acuerdo con la versión de esta entidad, el paciente acudió al servicio de Urgencias de La Paz el 24 de junio de 2004 aquejado de "un fuerte dolor abdominal

e intensa hemorragia digestiva, con presencia de sangre en las deposiciones". Además, presentaba "quistes bajo la piel, dolorosos a la palpación".

"Sin embargo, y a pesar de que el cuadro clínico que presentaba era claramente sugestivo de una infección generalizada, los facultativos de Urgencias consideraron que no existía patología urgente que justificara su ingreso hospitalario", relató ´El Defensor del Paciente´.

No se le hicieron pruebas

Tampoco se le practicaron "pruebas complementarias para determinar el alcance de la infección ni su origen, y no consideraron necesario que permaneciera unas horas en observación para comprobar su evolución".

El hombre fue dado de alta "sin prescripción de tratamiento de ninguna clase" y tan sólo se llevó a cabo una prueba analítica que ya reveló la existencia de un cuadro infeccioso con "una exagerada leucocitosis (17.300, por encima del límite máximo de 11.600)".

A pesar de este dato, el paciente fue enviado a su domicilio. En las horas siguentes "los síntomas se intensificaron alarmantemente y aparecieron más nódulos subcutáneos y fiebre". Así las cosas, dos días después los familiares de M.G.S. avisaron al SUMMA 112, que lo trasladó de nuevo a las Urgencias del Hospital La Paz y donde esta vez sí quedó ingresado de "inmediato" ante "la envergadura del proceso infeccioso" que padecía.

Para entonces, la analítica reveló que el paciente presentaba una leucocitosis de 20.200 y, tras "varios días de intensa agonía" y sin que pudiera remontar la infección, el hombre falleció el 30 de junio de 2004.