Orishas: "Somos como un buen cocido a fuego lento"

  • El trío se junta de nuevo en su gira El regreso de los dioses, que llega el domingo al WiZink Center de Madrid.
  • "La evolución, si está bien hecha y pensada, trae una revolución mucho más linda".
  • "El éxito actual de la música urbana viene de algo que llevamos haciendo veinte años".
Yotuel Romero (i) y Riverí "Ruzzo" Medina (d), dos de los tres integrantes del grupo Orishas posan durante la entrevista con 20 minutos
Yotuel Romero (i) y Riverí "Ruzzo" Medina (d), dos de los tres integrantes del grupo Orishas posan durante la entrevista con 20 minutos
JORGE PARÍS
Yotuel Romero (i) y Riverí "Ruzzo" Medina (d), dos de los tres integrantes del grupo Orishas posan durante la entrevista con 20 minutos

La banda cubana regresa, tras siete años de silencio, con una gira en la que presentan su nuevo estilo urbano y que precede a su próximo disco.

¿Por qué volver justamente ahora?

Yotuel Romero: La gran pregunta. El destino quería que ocurriese justo ahora, sus motivos tendrá. Todo en este regreso ha sido nuevo, nuestras intenciones también. Llevamos veinte años en el negocio y seguimos descubriendo cosas.

Si yo, como precursor de este regreso, hubiera sabido que íbamos a vivir lo que estamos experimentado ahora, habríamos vuelto mucho antes.

Empezaron haciendo música urbana, un estilo en pleno auge con el éxito de Despacito.

Yotuel: Cuando empezamos éramos los raros, teníamos un cantante tradicional y dos raperos, y a la compañía no le gustaba. Ahora, mira Despacito. Al final, el público quiere sentir en una canción lo salvaje. Nosotros lo vimos en el 99. La explosión urbana de ahora viene de algo que llevamos 20 años haciendo.

Nos dicen que fuimos visionarios, pero no es así, simplemente hicimos lo que necesitábamos hacer. Cuando empezamos, en Cuba estaba sonando un rap americano y necesitábamos que el mundo conociera una isla más auténtica.

¿Regresan por necesidad?

Yotuel: La necesidad de volver vino de la actual carencia del toque delicatesen en la música urbana. Faltaba algo especial, faltaba Orishas. Somos como un buen cocido hecho a fuego lento, con dedicación y amor, no unos garbanzos exprés.

Sacan nuevo disco, ¿qué debe esperar el público?

Yotuel: Música de calidad. Gourmet saldrá en mayo, es un disco que venimos cocinando a fuego lento desde hace más de un año, aunque en nuestra cabeza ya llevaba como diez. Es un reflejo de lo que hemos sembrado.

Despacio, pero con buena letra. Incluso han salido de gira antes de presentar el álbum.

Yotuel: Sí, porque queríamos testearlo con el público antes de que pudieran escucharlo en casa. Quisimos educar a la audiencia en lo que les espera, porque estamos renovando nuestra música y al público. No podemos sacar un Orishas de hace veinte años, tenemos que renovarnos, hemos madurado y hemos escuchado a la calle.

Orishas enamora con sus directos, la gente sale fascinada de nuestros shows. Muchos artistas de la cúspide no saben dar un directo y prefieres escucharlos en casa. El disco tiene que ser peor que el directo.

Recibieron muchas críticas por su primer adelanto, Sastre de tu amor, porque le faltaba ese toque gamberro de Orishas.

Riverí Medina: Esperaban un halo cubano, pero ha servido para educar el oído a esa gente que nunca nos había escuchado. Con Sastre de tu amor demostramos que seguimos siendo urbanos, pero con más clase.

Yotuel: La evolución trae una revolución, siempre. No puedes tenerle miedo a la evolución, a que tu público entienda que tú tienes que evolucionar y él tiene que evolucionar contigo. Hay gente que se ha quedado en los Orishas del pasado y que nos va a criticar igual si hacemos los mismos temas de hace veinte años. O evolucionas, o mueres. Hoy más que nunca el público necesita a un grupo como Orishas, necesita escucharnos para darse cuenta de qué es la calidad.

Como cubanos emigrantes, ¿qué creen que ocurrirá con Cuba ahora que está Trump en el poder?

Yotuel: Lo que trajo Obama a Cuba fue decirle a los cubanos: "Yo quiero que ustedes piensen en el sueño cubano, no en el americano". Con Trump las cosas se han troncado de nuevo y parece que ahora tendremos un líder ajeno a los Castro, que no esté tan unido a la revolución. Veremos qué renovación trae. No hay que tener miedo a que venga la evolución, porque si está bien hecha y pensada, trae una revolución mucho más linda.

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