Una asociación de guardias civiles critica que la dirección del Cuerpo pretenda aprobar una orden que "prohíbe atender, consultar o usar" teléfonos móviles personales durante el servicio, así como otra que regula la vestimenta y el aspecto personal, porque ambas vulneran sus derechos fundamentales.

Así lo denuncia en un comunicado Independientes de la Guardia Civil (IGC), que considera esas normas "vulneran los derechos a la propia imagen, al desarrollo de la personalidad, a la libertad de expresión, información y comunicación, además de ser motivo de discriminación por sexo".

Fuentes del instituto armado han precisado que ambas se refieren únicamente a lo que afecta al servicio y, en el caso de la primera aún está en fase de borrador.

Según estas fuentes, en el primer caso se trata de racionalizar y aclarar el uso de móviles en momentos de trabajo, sobre todo para evitar distracciones y la difusión de imágenes o conversaciones referidas al servicio, y en el segundo de actualizar dos normas antiguas sobre uniformidad, aunque sin cambios destacados.

Para IGC, el borrador que pretende aprobar la Dirección General supone que "durante el tiempo de prestación del servicio, se les prohíbe atender, consultar o usar dispositivos electrónicos móviles particulares, y sólo podrán comunicar con familiares a través de los medios oficiales desde las centrales coordinadoras de los servicios".

No obstante, se podrá llevar apagado para su uso en la pausa de descanso del servicio, aunque en determinados momentos o lugares, o por orden del superior, se podrá prohibir portarlo incluso apagado.

IGC considera que "las nuevas tecnologías deben ser una herramienta más a nuestro alcance laboral" y detalla que "el anticuado sistema de comunicación" que usan tiene muchas "zonas oscuras" sin cobertura, donde un teléfono móvil puede ser la solución de un aviso por accidente o similar.

La asociación critica que, en otra orden, se prohíban tintes de pelo "que no sean naturales de los colores del cabello, o la prohibición de trenzas de tipo étnico", algo que de por si ya es una "discriminación".

Tampoco permite corte de pelos irregulares ni que los hombres se maquillen, lleven pendientes o exhiban tatuajes, así como que ningún agente fume en lugares no prohibidos, además de evitar mascar chicle, en una propuesta "retrógrada y no adaptada a la sociedad actual", dice IGC.

El borrador de la orden sobre el uso de móviles, pretende reunir "directrices básicas para el fomento de actitudes positivas durante la prestación del servicio, que eviten situaciones poco deseables como accidentes laborables, relajación de las medidas de autoprotección y seguridad", al tiempo que "limiten las distracciones del personal (...) y coadyuvar a la protección de datos y material sensible".