PSOE y Unidos Podemos rechazaron este martes el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) presentado por el Gobierno en el Congreso. A juicio de los grupos de la izquierda, estas cuentas consolidan los recortes de los años más duros de la crisis, reducen el gasto público, e impedirán que la recuperación llegue a los más desfavorecidos. Cs, en cambio, sacó pecho de su pacto con el PP y defendió que estos presupuestos son "los más sociales en una década".

En una rueda de prensa en la Cámara Baja, la portavoz parlamentaria de los socialistas, Margarita Robles, manifestó la "enorme preocupación" de su grupo por los planes del Gobierno para "que España sea uno de los estados de bienestar más pobres de la Unión Europea", por la ausencia de políticas de redistribución, y por la estrategia del Ejecutivo de "reducir el déficit a cambio de recortar gasto social", esto es, "a cambio de recortar a las personas que más lo necesitan".

En palabras de Robles, las cuentas del Gobierno "siguen la tendencia de reducción del gasto social" y de "relegar la modernización del proceso productivo" de los siete años de Rajoy. La socialista criticó el "electoralismo" y el "triunfalismo" del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que dice que estos son los presupuestos de "pensionistas y funcionarios", cuando en realidad el gasto social crecerá "solo" el 2,8%, por debajo del crecimiento nominal del PIB (4,2%), dijo Robles.

La diputada también denunció el "retraso" con la que llegan las cuentas a la Cámara y subrayó que, si no consigue aprobarlas, Rajoy tiene que presentarse a una moción de confianza o convocar elecciones. Finalmente, preguntada por la petición de Rivera (Cs) de que el PSOE se abstenga y permita la aprobación de los PGE, replicó que los socialistas no admiten "lecciones de sentido de Estado" de "recién llegados a la política que viven de la frase, el titular y la foto".

Irene Montero, portavoz de Unidos Podemos, por su parte, coincidió en la crítica a los "más de seis meses de retraso" con los que el Ejecutivo presenta las cuentas en la Cámara, incumpliendo el artículo 134 de la Constitución. En cuando a su contenido, Montero denunció que, mientras el PIB está ya "a niveles de antes de la crisis", el gasto público "está a niveles de los peores años de la crisis económica": "Aumenta la riqueza, pero no llega a los bolsillos de la gente", resumió.

La parlamentaria morada insistió en que estas cuentas consolidarían a España como "el cuarto país donde el gasto público menos reduce las desigualdades" y que "impiden" que la recuperación llegue a los centros de salud, las escuelas y universidades o los barrios humildes "azotados durante años por la crisis económica". Montero recordó que Unidos Podemos presentó hace semanas unas cuentas alternativas y sostuvo que "es posible tener unos PGE que reviertan recortes".

Además, criticó que el Gobierno haya dejado sin ejecutar buena parte del presupuesto de 2017 para partidas sociales, como 44 millones que estaban previstos para financiar las ayudas a la dependencia y que finalmente no se gastaron, el 35% del presupuesto para vivienda o el 70% para investigación e innovación, según datos de Podemos. Por último, pidió al PNV que no apoye estos presupuestos y exigió al PSOE que "garantice" que Pedro Quevedo, el diputado de Nueva Canarias -que concurrió a las generales en coalición con el PSOE-, no respaldará "los presupuestos de la vergüenza".

Toni Roldán, portavoz de Economía de Cs, sostuvo en cambio que, tras "años de recortes y subidas de impuestos del bipartidismo", estas cuentas supondrán una "mejora para una gran parte de la ciudadanía". A juicio de Roldán, estos son los presupuestos "impulsan el crecimiento" económico y son los "más sociales en una década", ya que incluyen, como fruto del pacto entre el PP y Cs, medidas "muy importantes" por las que expresó su satisfacción: "Estamos muy satisfechos con lo conseguido", dijo.

En concreto, y pese a que el PP es un socio con un "bajo grado de fiabilidad" que "arrastra los pies" cuando se le piden reformas, Roldán explicó que Cs ha logrado que los presupuestos incluyan una mejora de las pensiones que beneficiará a "cuatro de cada cinco pensionistas", una bajada de impuestos para mileuristas, un paquete de medidas para favorecer la conciliación, un complemento salarial para jóvenes, la equiparación salarial para policías y guardias civiles, una batería de medidas sobre "regeneración" y un plan contra el fraude, entre otras medidas destacadas.

En todo caso, el partido naranja sabe que el Gobierno aún no tiene los votos necesarios -faltan los de PNV y NC-, aunque Cs opción preferiría que fuese el PSOE quien apoyará las cuentas para evitar el "chantaje" de los nacionalistas. Roldán, de hecho, fue muy duro con los socialistas, a los que acusó de "dinamitar" tres millones de empleos durante la crisis, de ser "corresponsable del robo de las cajas", y de enrocarse ahora en el no es no, algo que, a su juicio, debería llevar al PSOE a "reconsiderar su propia utilidad" como fuerza política. "Porque para partidos inútiles ya tenemos a Podemos", zanjó.