Aunque existen comercios dedicados a esta labor, Carmona asegura que no son acordes a su filosofía, pues "lo mismo venden libros y prismáticos que jaulas, bebederos y comederos para tener a las aves enjauladas".

Su finalidad, en cambio, está más relacionada con "disfrutar contemplando las aves", de ahí que crear una tienda "donde la gente pueda aprender un poco de todo e informarse de qué libro necesita para empezar o ampliar conocimientos".

Para ello, en su página web el director gerente de Ornithia ofrece guías para identificar a estos animales o conocer los lugares donde se pueden avistar, pretendiendo ser un punto de encuentro para aficionados de la ornitología, dando respuesta tanto al principiante como al experto con productos y servicios personalizados.

Al igual que con los libros, los prismáticos y los telescopios que oferta Carmona en su tienda sirven para comenzar o para seguir adentrándose en este mundo. "En función de lo que necesite la persona, le recomiendo los que debe usar", explica.

Además, desde hace unos meses, el gerente de Ornithia ha incluido la ruta de la Desembocadura del Guadalhorce, aunque pretende ofrecer más. Ésta comprende la visita al observatorio de la Laguna Escondida, el de la Laguna Grande, el de la Casilla y el de Aves Marinas.

Desde allí, guiados por él mismo, se observan, dependiendo de la época del año, la garza real, garceta común, zampullín común, aguilucho lagunero, martín pescador, diversas anátidas, cormoranes grandes, gaviotas, una gran variedad de limícolas, gallineta común, cigüeñuela y avoceta, alcatraces, águila pescadora, etcétera.

UN TESORO "INMENSO" EN ANDALUCÍA

Por otra parte, Carmona lamenta que tanto la tienda como la ornitología tengan un público tan "concreto y especializado", defendiendo que "la mayor parte de la fauna de Europa está en España y, concretamente, en Andalucía, donde hay un tesoro inmenso", ha asegurado.

Según el director de Ornithia, "Málaga y Andalucía tienen un potencial que no se aprovecha" y ha considerado que una feria de turismo ornitológico sería "fantástica" y un "escaparate muy importante e interesante para el turismo local y extranjero".

Con esta pasión por el mundo de las aves creó Ornithia en 2017. Así, tras más de 14 años dedicándose a otro oficio y quedarse en el paro en 2013 decidió que era el momento de, por un lado, "encontrar un trabajo que me gustara" y, por otro, "dedicarme al mundo de las aves, los animales y la naturaleza".

Además de impregnar su comercio con la máxima del respeto a los animales, también quiere poner en valor pájaros que no son muy conocidos. Por ello, su logo es un colirrojo tizón, un pájaro "que parece una brasa con su cola roja y su antifaz negro"; es "muy curioso, simpático y elegante", ha concluido.