Con su nombre de pila a secas, decide Jose firmar su queja sobre el «mal estado» del pavimento en la Gran Vía de las Germanías de Valencia.

Utiliza habitualmente su moto para desplazarse por la ciudad y de medio de transporte para ir al trabajo. Denuncia que el recorrido que hace diariamente por la céntrica avenida -parte de ella ahora en obras por la ampliación del metro- es un «inmenso bache». Las motos tienen que ir «sorteando» las deformaciones y desniveles del pavimento. Al límite de los malos presagios, aventura que llegará un día a «clavarse alguien con su moto en uno de los tantos socavones».

Cuando compara el estado de esta vía urbana con las nuevas avenidas y las calles del entorno de la Ciudad de las Artes y de las Ciencias, sugiere que el Ayuntamiento destine las inversiones en infraestructuras urbanas de forma más equitativa. Recuerda que los recursos de financiación municipal salen de los impuestos de los ciudadanos.

Lo que pone sobre el tapete Jose, lo puede suscribir cualquiera de los miembros de la asociación Motos Clásicas de Valencia. Sus asociados son apasionados de las motos y expertos conocedores del mundo del motociclismo. Su presidente, Francisco González Motes, agranda la queja de Jose para criticar a las autoridades municipales, en general. Se lamenta de que «no se tenga en cuenta la opinión de los usuarios de motos», a la hora de planificar y ordenar las vías públicas para mejorar la circulación.

Valentín Salvador, otro especialista de la misma asociación y coordinador de Vespino.com aprovecha que se hable aquí de los riesgos de quienes a diario van en moto por Valencia para recordar que hay otros «peligros encubiertos», como el de la pintura de señales en la calzada «que hace patinar a los vehículos de dos ruedas, motos y bicicletas y resbalar a los peatones», comenta.

Su asesor Ignacio Pou defiende a capa y espada un nuevo plan de mantenimiento de infraestructuras que para el 2008 contará con un presupuesto de 4 millones de euros, con los últimos avances tecnológicos. El asesor confirma a este defensor que los servicio de inspección urbana están trabajando, «desde hace cuatro meses», con PDA (agenda electrónica) y sistema GPS para señalizar las deficiencias en la vía pública en tiempo real. En el distrito de Abastos, los agentes de Policía de Barrio utilizan el mismo dispositivo, a modo de ensayo para ampliarlo después a toda la ciudad.

EVALUACIÓN DE LA RESPUESTA:

Concejalía de Ordenación Urbana: Notable

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